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Octubre es el primer mes en el que he tomado contacto con los más pequeños. He tenido la oportunidad de relacionarme con niños y niñas de 3, 4 y 5 años. De profundizar en emociones, sentimientos, cercanía y diversión.
Noviembre es un mes de progresos, de cambios y lleno de energía. He jugado con los más pequeños, me he divertido y he podido ejercer de profesora que es lo que de verdad me apasiona.
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